Nehemías, el hombre detrás del muro
Pocas personas están familiarizadas con la figura bíblica de Nehemías, y sin embargo, jugó un papel decisivo en la reconstrucción y el restablecimiento de Jerusalén en el siglo V a.C. después del exilio babilónico. Aunque no hay consenso acerca de las cronologías relativas de los libros de Esdras y Nehemías (las fechas bíblicas no son claras), el regreso de Nehemías a Jerusalén, es probablemente antes que Esdras por un par de años. Los dos hombres trabajaron juntos para restaurar la ciudad y que su pueblo se vuelva a dedicar nuevamente a Dios.
Nehemías era un alto oficial de la corte persa del rey Artajerjes I en la ciudad capital de Susa, que se encontraba a 150 millas al este del río Tigris, en lo que ahora es Irán. Nehemías sirvió como copero del rey (Nehemías 1:11), que, evidentemente, lo puso en una posición (como copero) para hablar con el rey y hacerle la solitud de favores a él. Después de escuchar sobre el triste estado en que se encontraba Judá, Nehemías adquirió el permiso del rey para regresar a Jerusalén y reconstruir la ciudad y sus fortificaciones. Incluso se le dan cartas del rey para garantizar el paso seguro y obtener la madera de los bosques del rey para las puertas y las paredes de Jerusalén.
Nehemías regresó a Jerusalén en el 445 a.C. como el gobernador de la provincia de Judá / Yehud. De inmediato observó los daños de toda la ciudad en su viaje nocturno alrededor de los muros (Nehemías 2:12-15). Consiguió la ayuda de la gente para reparar rápidamente las brechas en el muro. También les instó a establecer guardias para defenderse de la amenaza constante de quienes se oponían a sus esfuerzos, incluyendo los ejércitos de Samaria, los Amonitas y los de Asdod.
Como gobernador, Nehemías dice que él no se aprovechó de las asignaciones de alimentos y de la tierra que se le permitió debido a su oficio, porque ya había una gran carga para el pueblo de su provincia (Nehemías 5:14-19). También hizo que los otros nobles y funcionarios perdonaran todas las deudas pendientes y les ordenó que regresaran todos los terrenos y el dinero que había sido tomado como impuesto para que la gente pueda alimentarse y alimentar a sus familias.
El trabajo apresurado de reparación y reconstrucción de las murallas de Jerusalén y las puertas se completó en sólo 52 días (Nehemías 6:15). Otro de los logros de Nehemías era hacer registro y genealogía de todos los nobles, los funcionarios y las personas que vivían en Judá.
En la parte superior de la ladera oriental de la ciudad de David, Nehemías y los exiliados que regresaron construyeron una muralla en la ciudad. A pesar de que sólo repararon los muros ya existentes en otras partes de la ciudad, el muro, justo encima del escarpado del Valle de Cedrón estaba demasiado dañado y demasiado difícil de reparar. Así que volvió a poner la pared del este más arriba de la pendiente y, según el autor Eilat Mazar, construida directamente sobre la parte superior de un muro en ruinas del palacio del rey David (también conocida como la gran estructura de piedra) y su muralla masiva (conocida como la estructura de piedra escalonada). Zev Radovan.
El libro de Nehemías se suele leer junto con el libro de Esdras, como un libro largo. Nehemías 8.10 se considera parte de la llamada “fuente de Esdras” (que incluye Esdras 7-10), mientras que Nehemías 1-7 y 11-13 son de una fuente independiente que los estudiosos llaman la “memoria de Nehemías”. Las Memorias de Nehemías que está escrito en primera persona y relata detalles de la vida de Nehemías, sus acciones y su gobierno de la provincia, probablemente destinado a servir como un registro oficial de sus logros que se depositara en los archivos del Templo. Las historias son interrumpidas por las oraciones a Dios, como “Acuérdate de mí para bien, Dios mío, y de todo lo que hice por este pueblo.” (Nehemías 5:19).
Autor: Dorothy D. Resig, is the Managing Editor of Biblical Archaeology Review | BAS | Noah Wiener, thank you very much for all the support! | Traducido y Adaptado por Galvin Misael